La luz como material

Passatges bcn

Proyecto: Doce Coop
Autor: James Turrell
Localización: Barcelona
Año: 1992

Los juegos olímpicos no son sólo un evento deportivo, sino también una manifestación cultural que enriquece la ciudad con una pluralidad de actos y exposiciones, que en el caso de Barcelona se materializaron desde el 1988. La lista de manifestaciones artísticas fue numerosa y algunas tuvieron un éxito extraordinario como el Deuce Coop en el Convent de Sant Agustí.

Situada en la calle Comerç, se trata de un juego de luz apreciable a partir del atardecer, cuando la luz natural empieza a desvanecerse para dar paso a la luz de neón.

Ejemplar por su claridad, se trata de un edificio histórico que durante los s. XIV al s. XVIII fue convento de los frailes eremitas de San Agustín y posteriormente cuartel militar hasta el s. XX.

En 1990 se inicia un proyecto de recuperación del edificio para usos comunitarios. Se encargó el diseño al artista James Turrell, quien reconvirtió el pasillo que conduce desde la puerta del antiguo cuartel hacia el interior del claustro en un umbral que denominó Douce Coop. El color amarillo señala los pasos de puerta mediante un tubo de neón encastado, que actúa realmente como baliza indicando el paso de un espacio a otro. 

El arte de la luz es una experiencia que está basada en los cambios de la percepción que se logran con efectos lumínicos. Es el resultado de la combinación del espacio y la luz que tiene capacidad para alterar dimensiones, perspectivas y colores en el espacio donde actúa. 

Este ejemplo de diseño lumínico muy corto y concentrado en el espacio de acceso al edificio, puede ser trasladado a lo largo de recorridos para aminorar el riesgo de desorientación o confusión. El efecto de la luz y el color tiene consecuencias con un alto impacto sobre la percepción, ya que puede reducir o ampliar las dimensiones de los espacios que pierden o ganan profundidad a través de estas mezclas.

Underneath

Passatges bcn

Proyecto: Series of 22 C-prints on transparency in lightbox called Underneath
Autor: Map-Office
Localización: Guangzhou, Xina
Año: 2004

Tomando el método de la observación de las infraestructuras como un modo de clasificación, Underneath (2004) consiste en una serie de fotografías y un video que documenta la vida en bucle bajo los 63 kilómetros de carretera elevada que rodea Guangzhou, un "imperio privado" con una influencia indebida sobre la economía, geografía y cultura, perteneciente a la sociedad Hopewell Holdings.

El video y las fotografías incluyen imágenes de los vertederos, plantas, almacenes, cruce de caminos, carritos de comida, mesas de billar, motos, restaurantes, televisores, agua contaminada, muebles, camiones estacionados, pollos, pancartas, graffiti, y, a los lados, nuevas villas, pueblos tradicionales, granjas, fábricas y centros comerciales. En el caso de las fotografías iluminadas, los cuadros de texto se refieren a acciones como comerciar, percibir, inventar, y después, todo tiene lugar por debajo de esta línea sin apuntar hacia la fuga, ya que la carretera es en realidad un anillo infinito que lleva la instalación eléctrica hacia las zonas menos desarrolladas, del mismo modo que los transbordadores de personas y mercancías se dirigen hacia los centros más urbanizados.

Los viajes y transportes en superficie pueden ser unidimensionales, avanzando a lo largo de esta línea en ambas direcciones, pero debajo de ella emerge una amalgama de espacios heterogéneos que crea un sentido diferente a la "unidad territorial" y "distribución socioeconómica”, inventar una nueva geografía de vida a través de la desestabilización del sentido de lugar. La vida en esta zona implica una historia espacial acelerada fundamentalmente ligada a la velocidad, pero no se mueve necesariamente. Además de funcionar como un transportador, la carretera también ofrece para los que viven por debajo y alrededor de ella la estructura, aunque sea a través de "formas sin articulación espacial" que rodean esta línea geográfica artificial masiva que transforma el paisaje aun cuando crea otro. Esta zona de contacto y el conflicto articula los valores estéticos de la infraestructura “urbanismo de sartén” emergente desde el delta del Río de las Perlas. Robin Peckham

La calle compartida

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Proyecto: Acceso a la calle Artistas por la calle Don Quijote
Autor: MANSILLA + TUÑÓN arquitectos y Luis Díaz-Mauriño
Localización: Madrid
Año: 2003. Concurso primer premio

La propuesta para el acceso a la calle Artistas por la calle Don Quijote intenta que las personas, los que habitan la ciudad, recuperen el protagonismo, convirtiendo la calle en algo más que un paso, donde poder estar y poder compartir. Las cosas se cuidan cuando se viven. Nos vienen a la memoria, con cierta envidia, Lisboa, con las maravillosas uniones (terrazas, miradores, tranvías, elevadores…) entre la Baixa y el Aterro da Boavista con el Barrio Alto.

Todas las conexiones de la calle Artistas, que salvan la diferencia de cota entre el antiguo pueblo de Cuatro Caminos y la ciudad voraz y tacaña que, dándole la espalda, lo ha sobrepasado, surgen como cicatrices, heridas mal curadas, apenas unos desalentadores desfiladeros, siempre de paso, entre coches amontonados.

La gran diferencia de cota, casi 9 metros, para tan poco desarrollo y la necesidad de varios accesos a cota intermedia para los edificios vecinos, hacen que el proyecto apueste por un generoso ascensor público, pensando en los cada vez más viejos vecinos del barrio, como enlace de las calles, acompañado por una escalera discreta que admite la aparición de terrazas para los accesos intermedios. La colocación del elevador público, al fondo, casi en la esquina con la calle Artistas permite la aparición de una pequeña pero necesaria dotación, que en principio podría ser un centro de día para personas mayores o quizá una sala de exposiciones o simplemente un lugar donde leer el Quijote, bajo la escalera y las terrazas, iluminada por cuatro lucernarios iguales y distintos, como lo son las personas. Estos lucernarios son la fachada del proyecto y además la barandilla de las terrazas, pero también las lámparas que iluminan por la noche. Un nuevo rostro para las fachadas medianeras y una pequeña plaza arbolada delante, ya sin coches, completan el proyecto.

Los ciudadanos definitivamente debemos ser ambiciosos, y sólo entonces podremos hacer nuestras las palabras de Naguib Mahfuz, “Aunque el callejón está totalmente aislado del bullicio exterior, tiene una vida propia…”

A baix els vehicles!

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Projecte: Remodelació Ronda del Guinardó
Autor: José Antonio Martínez Lapeña i Elías Torres Tur
Localització: Barcelona
Superficie: 50.000 m2
Any: 2011

Al tram de la Ronda de major desnivell, les dues direccions de circulació estaven separades per cinc metres d'alçada. Enderrocar la volada que suportava la circulació superior i traslladar els vehicles al nivell inferior ha permès que aquesta àrea superior es converteixi en una gran vorera de passeig, amb circulació restringida als serveis i accés als garatges dels edificis. El mur en el qual es recolzava la volada, suport d'aquest nou passeig, i al costat del tram que ara es circula en dues direccions, s'ha revestit de maons fono-absorbents esmaltats en dos tons de verd que multipliquen les seves tonalitats amb la reflexió de la llum. Una jardinera longitudinal recorre la part alta del mur amb plantes penjants que ajuden a fer més amable la seva inevitable presència. Tots els murs de l'àrea renovada estan revestits amb els mateixos maons esmaltats per tal d'unificar i fer reconeixible la intervenció. Acompanyen al peató i el guien per conviure amb els dos nivells de ciutat.